Mientras media España hace chistes, la Botella nos ha hecho por un lado perder una buena oportunidad para generar empleo y por otra, quedar en ridículo ante toda la comunidad internacional. Con la de años que esta individua lleva chupando del dinero público gracias a su maridito, se podría haber pagado veinte cursos de inglés para no ser tan ridícula. Y que un miembro del COI despache la candidatura de Madrid diciendo que mejor nos gastábamos el dinero en mejorar la economía del país, es para llorar.
Mientras tanto, en primero de carrera ponen como tarea leer documentos científicos en inglés sin haber tenido previamente una asignatura de inglés científico. ¿Cómo pretenden que los estudiantes, con el bajo nivel del inglés de bachiller, entiendan fácilmente su variante científica? Pero bueno, como siempre, la formación estará disponible para quien la desprecia y será prohibitiva para quien la valora.
Las cosas claras y el relaxing café con leche espeso.
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