Solaris

Ayer ví "Solaris" (Tarkowski, 1973). Tras haber visto "Erasehead" (D. Lynch, 1977), pensé que no vería nada más raro que eso. 166 minutos de peña hablándome en ruso, en una película que no es tan de ciencia-ficción como lo es de amor y mensaje filosófico e introspectivo. La película se hace pesada, ¿qué digo pesada? cargante en algunos tramos, en los que el director parece pasarse de listo con sus escenas hipnóticas que más que ser una recreación de los escenarios, es un malgasto en el metraje. De todas formas, si se hace el esfuerzo, se puede ver y además su significado da mucho que pensar. Ahora toca hacerse con el libro.